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El Pinar del Rey, un paraíso forestal en el corazón de la comarca

Rosario Pérez | Fotos: ©Fran Montes, ReachExtra

Este “pulmón verde” de 338 hectáreas ofrece senderos de singular belleza, como los del Arroyo de Alhaja, el Cerro del Águila y el Tajo del Pajarraco…

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Pinar del Rey | ©Fran Montes, ReachExtra

La llegada del otoño y el progresivo descenso de las temperaturas nos invitan a redescubrir muchos de los parajes naturales que nos rodean, verdaderos paraísos forestales que nos ofrecen distintas alternativas para pasar parte de nuestro tiempo de ocio al aire libre, rodeados de vegetación, respirando aire puro y alejados del estrés del día a día.

Uno de los preferidos por los campogibraltareños, especialmente para los fines de semana, es, sin duda, el Pinar del Rey: un parque suburbano de 338 hectáreas ubicado en el término municipal de San Roque, justo detrás de la colina sobre la que se alza el casco urbano de la ciudad.

Este vergel natural, “del que se puede disfrutar en cualquier momento del año y a cualquier hora del día”, según se recuerda desde el Ayuntamiento sanroqueño, es uno de los grandes atractivos naturales de la comarca, y prueba de ello son las distintas actividades de senderismo y aventura que acogió este pasado domingo, 27 de septiembre, con motivo del Día Internacional del Turismo.

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 Pinar del Rey | ©Fran Montes, ReachExtra

El Pinar del Rey se puede dividir en dos grandes áreas: la zona sur, con más afluencia de personas y una amplia zona recreativa, con merenderos y otras infraestructuras para picnics y barbacoas, y la zona norte, más agreste y “salvaje” y en la que está completamente prohibido el uso de vehículos a motor.

Los amantes del senderismo, sin duda, tienen donde elegir. En la zona sur, donde se encuentra el Aula de Naturaleza, está la ruta del arroyo y la fuente de la Alhaja. En la zona norte destacan el Cerro del Águila y el Tajo del Pajarraco, desde donde se puede gozar de increíbles vistas panorámicas: las cuevas de las palomas, la loma de la caballeriza, el Peñón de Gibraltar, parte de la bahía, la finca de la Alcaidesa y, a nuestros pies, todas las copas de los árboles del Pinar, extendiéndose ante nuestra vista como un inmenso y verde mar.

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 Pinar del Rey | ©Fran Montes, ReachExtra

El sendero del Arroyo de Alhaja, que discurre paralelo al curso del arroyo durante poco más de 2 kilómetros, puede realizarse a pie o en bicicleta, y permite disfrutar de una de las rutas más bellas y accesibles de las cuatro de las que dispone el parque en la actualidad. Durante el recorrido se puede disfrutar, junto al frescor cercano del agua, de un sotobosque rico en arbustos y plantas como el majuelo, el lentisco y la coscoja, así como de varias explanadas de helechos. Asimismo, en el bosque de ribera que envuelve el arroyo abundan los alisos, los chopos y los fresnos.

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 Pinar del Rey | ©Fran Montes, ReachExtra

Una fuente envuelta en la leyenda

Al final del sendero, y justo a la derecha de la entrada al área recreativa del Pinar se encuentra la Fuente de la Alhaja: una fuente pública a la que se llega cruzando un bucólico puente de madera y que siempre ha sido muy popular entre residentes y visitantes por la calidad de su agua.

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 Pinar del Rey | ©Fran Montes, ReachExtra

Además, la fuente cuenta con su propia leyenda: la de una princesa que enfermó clavándose una joya (alhaja) envenenada por una mala persona que no consiguió matarla, porque, según la fábula, “las curativas plantas del bosque la sanaron de sus males”.

Cerca de allí, el Aula de Naturaleza, gestionada por el Ayuntamiento de San Roque, cuenta con un punto de información y un jardín botánico con especies de flora endémicas del ecosistema local.

Además, los guías de medio ambiente del Centro de Interpretación ofrecen información sobre los otros tres itinerarios ecológicos: las rutas del Tajo del Pajarraco, el Cerro del Águila y el Pinar del Rey.

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Pinar del Rey | ©Fran Montes, ReachExtra

Los dos primeros recorridos son más exigentes (el del Tajo del Pajarraco, con un trazado circular de algo más de 4 kilómetros, es de dificultad media, y el del Cerro del Águila, media-alta), mientras que el tercero es una ruta circular que discurre por la parte baja del Parque y que es apta para todos los públicos, incluidos los senderistas en baja forma física.

Entre la fauna autóctona del Pinar del Rey destacan aves como la abubilla y el cuco, reptiles como el lagarto ocelado (el más grande de los lagartos europeos) y pequeños mamíferos, como el topo ibérico. El Pinar, en el que tampoco es difícil ver buitres leonados y abejarucos, es, asimismo, zona de paso y refugio en época de calor para las aves migratorias que cruzan el Estrecho de Gibraltar

Una curiosa historia vinculada al mar

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Pinar del Rey | ©Fran Montes, ReachExtra

Este singular paraíso forestal, auténtico pulmón verde del Campo de Gibraltar, junto con el Parque Natural Los Alcornocales, tiene un origen curioso y una interesante historia, que no todo el mundo (ni siquiera los más habituales del lugar) conoce. De hecho, se trata de un paisaje creado por la mano del hombre que data de principios del siglo XIX, cuando, en torno al año 1800, la Armada Española (con semillas procedentes de Vejer de la Frontera) plantó en esa colina un ingente número de árboles, fundamentalmente pinos, para suministrar madera para los barcos de guerra.

Tal y como recuerda el Consistorio sanroqueño, cabe tener en cuenta que “en aquella época, España era todavía la primera potencia naval del mundo”, aunque, tras la derrota en la batalla de Trafalgar, en 1805, y la pérdida de esa hegemonía en el mar, el interés material por aquellos árboles fue decayendo y la naturaleza siguió su curso, hasta dar lugar a un verdadero tesoro medioambiental en aquella colina… Una colina que, según las crónicas más antiguas, había sido cedida a la ciudad de Gibraltar cinco siglos atrás, concretamente en 1310, después de que el rey cristiano Fernando IV consiguiera “reconquistar” la ciudad.

Una colina que, según las crónicas más antiguas, había sido cedida a la ciudad de Gibraltar cinco siglos atrás, concretamente en 1310, después de que el rey cristiano Fernando IV consiguiera “reconquistar” la ciudad.


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Pinar del Rey Fairy Forest Elisabet Domínguez San Roque

La iniciativa de una sanroqueña de construir casitas de hadas en árboles del Pinar del Rey para que los niños las busquen ha tenido tal éxito que ya proliferan por todo el recinto…

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