in

‘El Viajante’ Novela premiada de Emilia Luna

Rosario Pérez · Fotos: Fran Montes

Emy Luna: 'El Viajante’ - Foto: @Fran Montes

“Una persona puede llegar a recuperar su propia vida a través de los recuerdos de otra”

Galardonada con el premio de artículos periodísticos José Luis Tobalina y el Premio Onuba de Novela, la escritora Emilia Luna está inmersa en la promoción de ‘El Viajante’

La escritora Emilia Luna, sanroqueña afincada en Algeciras, atesora una dilatada trayectoria literaria, fundamentalmente en el campo del relato, que ha sido galardonada con numerosos premios, como El Laurel, Montefrío y Canyada Dárt, el Villa de Mazarrón de la Universidad Popular de Murcia, y los de las Universidades Pablo de Olavide y Universidad de Cádiz…

Además ha sido finalista en más de una treintena de certámenes, como los de Puente de Letras, Ciudad Galdós, Obrapropia, Luis del Val, Mundopalabras… y en 2012 ganó el 1º Premio de Cuento Navideño de La Ventana (Cadena Ser).

Entrevista-Emy-Luna-The-Traveller

Sin embargo, ha sido ya en plena madurez, literaria y vital, cuando la autora de los libros de relatos ‘Ojos de niña sobre el Estrecho’ y ‘Nanas del Estrecho’ (obra ilustrada en colaboración con la pintora algecireña Fátima Conesa), ha emprendido la ambiciosa aventura de publicar su primera novela: ‘El Viajante’.

Lo ha hecho de la mano de la editorial Onuba, tras ganar, en 2018, el Premio de Novela que convoca dicha editorial, y está como una niña con zapatos nuevos, disfrutando intensamente de la promoción de su obra, que ya ha sido presentada al público en Algeciras y Sevilla, y que próximamente la llevará también por otros rincones de nuestra geografía, como Los Barrios, Málaga e incluso San Feliú de Llobregat.

“Las cosas llegan cuando tienen que llegar, y tal vez éste haya sido mi momento”, comenta la escritora, más conocida en la comarca como Emy Luna, como firma, desde hace ya varios años, una columna de opinión en el programa ‘Hoy por Hoy’ de Radio Algeciras.

Entrevista-Emy-Luna-The-Traveller

De entre todas las alabanzas recibidas en las últimas semanas, que no son pocas, Luna reconoce que hay una que le ha tocado especialmente el corazón.

“Un antiguo profesor al que aprecio muchísimo, Juan Manuel Suárez Japón, dijo en el acto de Sevilla, en el que me presentó Juan José Téllez, que mi éxito consistía en haber sabido compaginar la ternura con el rigor literario, y la verdad es que me dejó sin palabras… No me podía haber imaginado un piropo mejor”.

El concepto del tiempo, y, más concretamente, de la percepción del paso del tiempo, es una de las piedras angulares de la literatura de Luna y (no podía ser de otra manera) uno de los ejes fundamentales sobre los que gira la trama de ‘El viajante’. “Me interesaba contar cómo una persona puede llevar una vida que pase desapercibida para los demás, e incluso para ella misma, y luego, redescubrirla y recuperarla, recuperar la propia vida, a través de los recuerdos de otra persona”.

Entrevista-Emy-Luna-The-Traveller
Emy Luna: ‘El Viajante’ – Foto: @Fran Montes

Emilia Luna, que ya tiene empezada su segunda novela, no sólo recordará los últimos meses de 2018 y los primeros de 2019 por la publicación de ‘El viajante’, sino también por la obtención del Premio de Artículos Periodísticos José Luis Tobalina, que le fue entregado a primeros de marzo en un acto lleno de poesía, organizado por el Ateneo José Román y la familia del recordado periodista, y en el que la galardonada emocionó a los presentes, al igual que ya hiciera en su artículo, con una encendida defensa de las Humanidades y su importancia en la Educación.

Licenciada en Historia y profesora de Diversificación SocioLingüística en Educación Secundaria, Luna lamentó que “en los últimos años se arrinconan en los colegios las asignaturas de Letras y se potencian las asignaturas relacionadas con las Ciencias y la Tecnología, que están orientadas a lo productivo, a las estadísticas, a la obtención de resultados materiales…»

Sin embargo, las Humanidades son un arma para la paz, la tolerancia y el respeto, y que estemos apartando de ellas a nuestros niños y a nuestros jóvenes no sólo es un error, sino también una prueba más de la deriva hacia la que va el mundo”.

¿Qué piensas?